Tiene algo de arácnido ese reloj de pulsera. Imagino la muñeca que habitualmente lo porta, descansando en la penumbra del cuarto, libre al fin de su telaraña.
Las luces en ese irregular enlucido de la pared son un regalo para las vista y la guinda perfecta para esta imagen.
Preciosa luz!!
ResponderEliminarLa luz y las texturas sensacionales.
ResponderEliminarUn abrazo
Un tratamiento perfecto de la luz y las texturas.
ResponderEliminarUn abrazo,
Yo no se mucho de bodegones, pero este, casi de carácter íntimo, me gusta mucho, por eso mismo, por ese halo de costumbrismo que lleva.
ResponderEliminarEnhorabuena, José Ramón.
Buen finde.
Me gusta mucho como posan los objetos. La delicadeza de la toma me parece estupenda.
ResponderEliminarUn saludo.
Muy buena luz. Las texturas geniales
ResponderEliminarPequeño pero lleno de intensidad!!!
ResponderEliminarMuy buena, tomo nota...un gran abrazo, José Ramón!!! ;)
Tan solo hace falta imaginación.. Un luz preciosa.. :)
ResponderEliminarTiene algo de arácnido ese reloj de pulsera. Imagino la muñeca que habitualmente lo porta, descansando en la penumbra del cuarto, libre al fin de su telaraña.
ResponderEliminarLas luces en ese irregular enlucido de la pared son un regalo para las vista y la guinda perfecta para esta imagen.
Un saludo
Imagem poética. gostei ;)
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